El violinista Héctor David hace un llamado a la sociedad para unirse a y crear una sinfonía de amor, esperanza y aliento para apaciguar la crisis que se vive en el mundo
Por Martha López Huan
¡Mirad cuán bueno y cuán delicioso es habitar los hermanos juntos en armonía! Salmo 133:1
Para el violinista hondureño Héctor David, la sociedad es una gran orquesta de Dios, “cada uno somos instrumentos con diferentes sonidos, carácteres y personalidades, pero hacemos cosas con un sentido definido”.
–En esta gran orquesta, es necesario trabajar unidos para vivir en armonía; todos quisiéramos sobresalir, pero hay que tocar en el momento adecuado para ser certeros –agrega el músico cristiano, quien promueve sus discos “Violín de adoración” y “Perfil y gratitud”.
En entrevista exclusiva, al término de su doble participación en el Ministerio Internacional Jesús Es El Señor (MIJEES), en el marco del Día del Padre, Héctor David Aguilar dice que todos tienen una función en la sociedad y en la vida, “en primer lugar hay que descubrirlo, en segundo administrar nuestra existencia y en tercero activarlos”.
–Cualquiera que sea nuestra función en la vida hay que activarlo en beneficio de la sociedad, porque si nos quedamos guardados tampoco serviríamos de nada; creo que debemos demostrar nuestro talento para convertirnos en instrumentos activos de la gran orquesta de Dios –asevera.
El músico hondureño que radica en Estados Unidos considera que en el mundo hay demasiada sinfonía de crisis: “prendes la televisión y ves catástrofes, enfermedades y guerras”.
Sin embargo, asegura que si se unen esfuerzos “y ponemos nuestro amor podemos callar la sinfonía de crisis o por lo menos apaciguar su sonido; podemos crear una sinfonía de amor, de esperanza y aliento”.

–¿Considera usted que México va en camino a la fe?
–Sí, creo que México crece a pasos agigantados en la creencia de Nuestro Señor Jesucristo y en el surgimiento de las iglesias, en relación con Guatemala y otros países de Centroamérica. Este país va por buen camino, aunque Guatemala registra el 51 por ciento de los cristianos –dice.
Acompañado de su violín, con el que musicaliza los salmos y cautiva al público de México, Estados Unidos, Centroamérica y Europa, Héctor David señala que donde hay más pobreza y dificultades hay más gente que cree en Dios, “donde hay mucha comodidad no necesitan al Creador”.
–En ese tenor, ¿qué mensaje le daría usted a la humanidad?
–Dependemos de nuestro Dios, negarlo es invitar a nuestra vida al sufrimiento, a la angustia, a vivir sin rumbo, porque Jesús dijo: “Soy el camino, la verdad y la vida” –responde.
Reflexiona un poco más y reitera: “Jesús es el único camino, todo lo demás que el mundo ofrezca, como el éxito, son accesorios, lo importante es seguir al Hijo de Dios, porque ahí está la esperanza, ahí está la salvación”.
Hermosas palabras y hermoso concierto. Me encanta que publiquen noticias de ánimo que alientan a los ciudadanos a ser mejores personas.
Muchas gracias por sus comentarios. Dios la bendiga hermana.